marzo 26, 2011

La espera que acaba...


37 semanas han pasado desde el día en que fuimos a aquella clínica en busca de respuestas a los malestares que me agobiaban, tremenda sorpresa que nos llevamos cuando descubrimos que la ''bacteria estomacal'' que creíamos culpable, resultaste ser tu, mi pequeña Valeria.
Tu papi y yo quedamos impresionados porque habíamos decidido esperar un poco en tenerte, para que así, cuando finalmente llegaras tu hermana y tu pudiesen tenerlo todo y más, pero claro, no contábamos con que allá en el cielo, Papá Dios y uno de sus angelitos conspiraban contra nuestros planes de espera. Cuando escuche la noticia, lloré, pero no te asustes, lloré por la inmensa felicidad que en ese momento me invadió, tu papi? bueno... él, por razones que te explicaré cuando tengas criterio formado, quedó en shock!
De camino a mi trabajo, mientras íbamos en el auto, no fue mucho lo que nos dijimos tu papi y yo, pero la sonrisa de satisfacción y alegría que iluminaba nuestros rostros hablaba por si sola, lo primero que pensamos fue cómo y cuándo dar la noticia!? acordamos reunir a las familias y decirles, pero la alegría era tan grande que no aguanté ni 20 minutos cuando ya estaba llamando y escribiendo a tus tíos, abuelos y bisabuela para contarles del gran acontecimiento. La familia de tu papi era la cereza del pastel, después de todo, serias la primera -todo (nieta, bisnieta, etc) de ese lado de la familia, muchas fueron las ideas, pero el resultado el mismo, llegamos en la noche a la casa de tu abuela, bastante tarde por cierto y bueno en vez de simplemente darle la noticia, le puse algo de drama a el asunto y con cara de situación, le extendí la hoja con el resultado de la prueba de sangre y ... La expresión en su rostro fue mejor de lo que hubiésemos podido imaginar! la alegría se apoderó de ella y seguidamente el silencio fue interrumpido por sus incansables gritos de emoción, despertando la curiosidad de tu bisabuela y tío-padrino Boli.
Esa noche di por sentado que mi vida, perdón, nuestras vidas, cambiarían por completo y así fue...
Todos han cuidado mucho de nosotras y se han cerciorado de que nada nos haga falta, hasta tu hermana participa y se que te encantara conocerla! algunas veces es un poquito gruñona, pero la dulzura en su corazón lo sopesa y desde que le dijimos que seria hermana mayor se ha tomado muy en serio su papel, acaricia la panza cada vez que puede, te habla, abraza y hasta te regaña cuando te pones intensa y me pateas muy fuerte. (escucharla decir: ''Valeria. No patees a mami!!'', mientras sus bracitos están estirados verticalmente y su ceño fruncido con una sonrisa, no tiene precio!)
Ahora queda sólo una semana y media para conocerte y estoy más que impaciente.
Cómo seras?, a quièn te parecerás? muchas preguntas, pero sólo una verdad, sea como sea, vamos a amarlas, cuidarlas y velar por que sus vidas sean lo mas felices posibles. No tardes en llegar mi pequeña, así, nuestra familia estará completa.


No hay comentarios:

Publicar un comentario